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Prohibido comprar a vendedores...

Hay cosas que emocionan sobre el carro del metro.
Un rapero con su niño, tan niño como el rapero. Mientras canta  pasa el que vende  cuchufli, sonríe y saluda al rapero, le regala unos cuchufli. El rapero se lo pasa con una sonrisa a su  niño. Termina de cantar,  el rapero pide colaboración. Justo pasaba el de los cuchufli. Ambos  sonríen,  le da unas monedas al rapero. Gracias socio dice su voz y sus ojos.
Me quedó pensando en la humanidad entera que vacila entre un vendedor de cuchufli, un rapero y un niño con su cuchufli. Mientras la voz metálica del parlante del carro que gruñe, No esta permitido comprar...

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